Y es que el estilo de vida de las personas, principalmente las mayores, cuando es sedentario e inactivo es una de las principales causas de las enfermedades cardiovasculares, junto con el alto consumo de comida rápida, de tabaco y/o alcohol, la diabetes o la falta de prevención y controles médicos regulares.
Hay quienes piensan que estas enfermedades surgen exclusivamente cuando se pasa a la etapa de vejez, lo cual es solamente un mito, pero la realidad es que el riesgo existe a cualquier edad por lo que es importante tomar acciones para fortalecer el sistema cardiovascular y el corazón.

Estas son algunas recomendaciones para la prevención de estas enfermedades

• Actividad física: Es importante que los adultos realicen ejercicio, durante 30 minutos, cinco veces por semana junto con rutinas para el fortalecimiento muscular, las cuales pueden incluir caminatas, trote ligero, ciclismo, natación, yoga y rutinas de pesas. Previo a esto es necesario consultar al médico.
• Dieta saludable: Es clave eliminar el consumo de carne roja, sal, azúcares, refrescos carbonatados y de alimentos con altos contenidos de grasa y añadir mayor cantidad de porciones de fruta y verdura, además de granos integrales por su alto contenido de fibra y consumir, al menos dos litros de agua cada día. También se recomienda limitar a dos tazas por día el consumo de café o el sustituirlo por té verse o negro, los cuales contienen antioxidantes.
• No más tabaco ni alcohol: Es casi una obligación quitar del consumo regular el cigarro o los productos de tabaco y de bebidas alcohólicas lo cual acelera el ritmo cardíaco.
• Mejor calidad de sueño: Es fundamental que los adultos duerman entre siete y nueve horas, lo cual mejora el metabolismo, la reparación de tejidos, fortalece el sistema inmunológico, además de dar la sensación de bienestar emocional.

¿Cuáles son las principales señales de advertencia de ataques al corazón?

• Dolores o molestias en el área del pecho
• Dolores en la parte superior del cuerpo, brazos, espalda, cuello o en el abdomen.
• Dificultades para respirar
• Náuseas
• Sensación de mareo

Es importante que los adultos mayores consulten con regularidad a su médico para hacer un seguimiento y monitoreo del funcionamiento de su corazón y el sistema cardiovascular, así como para hacer adaptaciones en su forma de vida.

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